Los áridos reciclados procedentes de los residuos de la construcción y demolición son cada vez más utilizados en nuevas obras de construcción, sobre todo por el aspecto económico, pero no hay que olvidarse de otro aspecto de importancia como el beneficio medioambiental que se consigue con el uso de áridos reciclados. Te contamos cuales son las principales aplicaciones de los áridos reciclados en este post.
Son muchas las aplicaciones que pueden llegar a tener los áridos reciclados y entre ellos destaca su uso para la creación de capas de firme de carretera o también la fabricación de nuevos hormigones, construcción de explanaciones, etc. Todo depende de la composición, naturaleza y también la granulometría con la que cuenten los áridos reciclados.
El uso más restrictivo es el de la fabricación de hormigón estructural. Para ello, se usa el árido reciclado que procede del hormigón dado que cuenta con una menor cantidad de impurezas y su comportamiento en nuevas aplicaciones está dando unos excelentes resultados.
Otra clase de áridos reciclados son los mixtos o cerámicos, que son muy característicos en muchas de las construcciones de la zona del mediterráneo. En este caso se suele desechar la fracción más fina de esta clase de material dado que es la que tiene más cantidad de sulfatos, por lo que si se fabrica hormigón con esta clase de árido reciclado, tendría una mejor durabilidad y también más contaminación potencial por la lixiviación.
Hay que estudiar bien la procedencia de los ácidos reciclados para poder obtener las correlaciones entre su propia composición y cuál sería su comportamiento mecánico en obra. Por esa razón, para hacer hormigón por ejemplo, no vale cualquier clase de árido reciclado, debe ser seleccionado para conseguir los mejores resultados.
Por otro lado, no hay que olvidarse que el comportamiento de los áridos reciclados también depende del sistema de tratamiento recibido en la planta de gestión de residuos, además de su propia composición.